En el Día Internacional de la Mujer Trabajadora,
el Comité Ejecutivo y la Secretaria de Género de la Confederación Trabajadores
de la República de Panamá CTRP, se une a esta conmemoración y a la lucha histórica que han tenido las mujeres
en defensa de los derechos, centrando en estos momentos nuestra
atención en las adversidades que se han manifestado por la pandemia causada por
la COVID-19 a la mujer trabajadora en nuestro país.
La situación por la que atravesamos
las trabajadoras es complicada en casi todo el mundo. No sólo debemos hacer frente
a la ofensiva del capital por privarnos de los pocos derechos que se mantienen
consagrados en las legislaciones laborales, sino que también somos testigos de
cómo los instrumentos que creamos para defender el acceso a seguridad social,
empleo decente, salarios dignos, negociación colectiva y libertad sindical, son
vulnerados por las políticas antisindicales en estas democracias imperfectas.
La ola de precariedad laboral golpea principalmente
a las Mujeres Trabajadoras de la población económicamente activa, son mujeres
que se dedican a alguna actividad económica de tipo informal sin accesos a
seguridad social, con altas tasas de desempleo, contratos de trabajo por tiempo
definido por años y sin poder defender sus derechos por la ausencia de libertad
sindical.
Pero no olvidemos a las mujeres que
trabajan en el mercado laboral formal, también sufren situaciones con la que el
movimiento sindical se tiene que enfrentar, principalmente nosotras las mujeres
como: la mayoría en contratos suspendidos somos mujeres, violación al fuero
maternal, muchas se abstienen de reclamar esas violaciones debido al
desconocimiento de las normas y como se aplican. Estamos convencidas que la finalización de
los contratos laborales a las mujeres en estado de gravidez, sin justa causa,
constituye una violación al fuero maternal.
Por otra parte, el marcado machismo
de nuestra sociedad ha sido un limitante para erradicar la violencia doméstica,
cuya expresión más brutal es el femicidio, que continúa siendo un problema cada
vez más grave. Mientras tanto las autoridades consideran que la violencia
machista y el acoso sexual no tienen
importancia para ser sancionados, lo que permite que las víctimas
queden en estado de indefensión. De
igual manera, se continúa dando el acoso sexual y laboral en los centros de
trabajo por parte de superiores jerárquicos e inclusive, de algunos compañeros
de trabajo. Hay que reiterar: LAS MUJERES NO SOMOS UN OBJETO SEXUAL, es más,
demandamos respeto a nuestros derechos y a la vida.
En el día internacional de la mujer
trabajadora 2021, Panamá aún con graves desagravio a la población entre las
cual está la NO ha Ratificado DEL CONVENIO 190 Y SU RECOMENDACIÓN 206, de esta
manera desprotegiendo sobre nuestras mujeres y la población en general, y la
segunda presentar nuestras demandas claves